Costó. Vaya que si costó. Pero después de cuatro derrotas consecutivas, Independiente pudo desquitarse. Y ante su gente, que volvió a superarse pese a la lluvia. Si bien la teoría dice que cada victoria vale tres puntos, no cabe duda de que la de ayer en La Unión tiene un valor extra por el factor anímico.
Y es que cuatro derrotas consecutivas, inevitablemente, pasan factura. Tras la pésima imagen que dio el equipo en Madrid Río, el grupo trabajó muy bien durante la semana. Aún así, Independiente tuvo un comienzo titubeante y se vio superado por un Sporting de Valdebernardo que lo complicó muchísimo.
Nada más comenzar el partido, La Burdeos avisó con una doble ocasión que tuvo a Alberto Colomo (se marchó lesionado al final de la primera parte) y a Ricardo Blázquez como protagonistas. Pero poco tardó el Sporting en acomodarse sobre el terreno de juego y dominar a un Independiente que no estaba cómodo.
Sólo una mano magistral de David Espada primero y el larguero después evitaron que los de Valdebernardo se adelantaran en el marcador. Por su parte, Independiente sólo pudo generar peligro en un arreón aislado sobre la primera media hora, con tres ocasiones seguidas (en la más clara un defensa visitante sacó sobre la línea un disparo de un siempre activo Pedro López).
Distintas fueron las sensaciones en el complemento. Independiente mostró otra cara, comenzó a dominar y eso se tradujo en ocasiones. El central Jose Polo (que volvía de una lesión) estrelló un balón en el larguero tras lanzar una falta lejana en el minuto siete. El dominio burdeos se hacía cada vez más evidente. Hasta el punto de gozar de tres oportunidades claras en apenas un minuto.
El gol de Carlos Sabroso (de un certero cabezazo) en el minuto setenta fortaleció aún más al cuadro local, que cinco minutos después incrementó su ventaja con un tanto de Pedro García (en posible fuera de juego). Además, Pedro López a punto estuvo de sellar su gran partido con un jugadón individual que no acabó en gol por centímetros.
Así se llegó al final de los noventa minutos. Independiente pudo acabar con la mala racha y, además, con la valla invicta. En ello mucho tuvo que ver David Espada, que en el último suspiro del partido tuvo dos intervenciones magníficas que sellaron una victoria fundamental para los dirigidos por la dupla Castellanos-Arroyo, que el próximo 15 de diciembre visitarán al Inter Vicálvaro.
La Burdeos formó con: David Espada ; Alberto Jiménez, Jose Polo (65′), Javier Zapata, Alberto Colomo (44′); Ricard, Zuzen, Ricardo Blázquez (64′), Dani Martínez (64′), Pedro López ; Carlos Sabroso.
Banquillo: Héctor Fernández, Jorge Saguar (44′), Fer García (65′), Daniel Vivancos (64′) y Pedro García (64′).
C.D. Independiente de Vallecas 