Crónicas, Masculino

Nos vamos a acordar de esto durante dos semanas

Brillante empate de Parque Arganzuela B ante un Independiente falto de ideas.

Mañana plomiza y temperatura ideal para acompañar a Independiente en el desplazamiento más lejano de la temporada; había que cruzar dos distritos hasta las pizpiretas instalaciones del Paseo Imperial. Ahí estamos, conociendo Madrid con la excusa de la Tercera Regional.

Independiente, a quien esta temporada se le están dando fatal los equipos de la parte baja de la tabla, salió al campo igual de plomizo que cielo. Daban más la impresión de funcionarios contando los días que faltan para jubilarse que de equipo dispuesto a llevarse el partido. Que sí, que están ahí al lado las muy merecidas vacaciones y el madrugón no ayuda. Que no. Pero.

La Burdeos, otra vez, tuvo que improvisar con la alineación. A las bajas previstas se suman ausencias de última hora que obligan a reorganizarse media hora antes del comienzo. Ya vamos mal. Una defensa con Gerard en el lateral derecho e Isaac acompañando a Leyson en el centro. Delante, a falta de delantero centro, Aarón y Calderón de medias puntas. El principal argumento en ataque era la velocidad de Yohel llegando desde la izquierda, y anda que no hizo kilómetros el rastamán nicaragüense.

El filial del Parque Arganzuela saltó a la moqueta relajadísimo, gastándose bromas, pero (no se equivoquen) más concentrados que Independiente. Basaron su juego en una línea defensiva  adelantada con Sabaté por delante estorbando  la circulación del medio campo burdeos. Volcaban el ataque por su derecha  buscando a Víctor Grau, aprovechando las siempre ofensivo Jorge Ávila. La “vibra” que transmitía la chavalada de verde era que las vacaciones ya habían empezado y esto era parte de la fiesta.  Un pelín de envidia sí que daban, la verdad.

Los Gritos de Leyson e Isaac colocando y buscando motivar a sus compañeros fueron constantes todo el partido. “Esto va a ser lo que nosotros queramos que sea” repetía el defensa segoviano.  Pero la empanada mañanera se le estaba haciendo difícil de digerir a Independiente. Y por si quedaban dudas de que los de verde, buen rollito de por medio, no habían venido a pasearse, en el minuto 16, Villarejo la manda al palo tras pase del Víctor Grau.

Sin alteraciones en el marcador ni en las pulsaciones, arranca la segunda parte con pequeñas variaciones. Entra a la cancha Yhon Valencia por Aaron, Yohel Chévez se coloca ya sin descaro de delantero centro y Gerard sube hasta al centro del campo, donde es mucho más feliz. El ataque burdeos vive sus mejores minutos. Calderón está a punto de conseguirlo en el minuto 50. Lo que hubiera cambiado la cosa. Pero.

El trabajo y las ganas de los arganzueleros daba  sus frutos en el minuto 60; tras romper a su par, Víctor Grau mete otro pase al área para que Ferrón marcara sin oposición. Si es que se veía venir. Tras el gol parecía que quien menos se creía el resultado eran los propios locales, que dieron un pasito atrás para contener la avalancha burdeísta. “Nos vamos a tirar dos semanas llorando” protestaba Isaac Mosquera. Quedaba tiempo para arreglarlo, claro.

Jorge Ávila avanza por la izquierda en el encuentro contra Parque Arganzuela B.

En  Independiente tocaron a rebato (que es medio tono por encima de la heroica y uno por debajo de la patética). Castellanos y Arroyo trataban de descubrir cuántos delanteros caben en un área sin que eso se traduzca en ocasiones. Que sí que hubo algunas, pero las que  vieron puerta se encontraron con las manos de un inspirado Jesús González. En algún lugar de Vallecas el Tano Pasman se desgañitaba pidiendo huevos a falta de otros recursos. Así que tuvo que salir el kaiser Echeverz, lesionado de la rodilla, a colocarse de palomero en el área. Y de su pierna mala, ya casi con el tiempo cumplido, llegaría el empate tras córner desde la izquierda con barullo incluido de serie y solucionado de uruguayas maneras. No digo más. Un gol que llegó igual que podría no haber llegado, no nos engañemos.

Al final, otro reparto relativamente justo, porque el descaro y la alegría la pusieron los de Parque Arganzuela para merecer su punto e Independiente se llevó el suyo por la superioridad técnica de sus jugadores y el orgullo azuzado por la bronca de no haber sido capaces de manejar y ganar este partido.

Felices vacaciones a todos. A los que se las merecen y a los que no, también.

N. de R.: Desde estas líneas queremos mandar un abrazo muy fuerte y muchísimo ánimo a nuestro jugador Asier Foruria, lesionado de gravedad la semana pasada. Dale duro, vasco, que te necesitamos pronto por aquí.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.